Señales de un amortiguador defectuoso
Los amortiguadores son uno de los componentes más importantes del vehículo, especialmente en términos de seguridad.
No solo afectan al confort, sino también a la eficacia de frenado y a la estabilidad de conducción.
El amortiguador y el muelle helicoidal reducen y amortiguan las vibraciones y ajustan la suspensión a las irregularidades del camino. Cuando el amortiguador ya no funciona correctamente, es necesario reemplazarlo urgentemente.
Pero, ¿cómo puedo reconocer un amortiguador defectuoso?
Si al realizar la prueba de rebote, intentando que el vehículo se balancee lo más posible en el guardabarros, se observa que el automóvil se balancea varias veces (> 2-3 veces), este es claramente un motivo para llevar su suspensión a un taller especializado para que la revisen.
Además, los componentes defectuosos de la suspensión pueden provocar un desgaste irregular del dibujo de los neumáticos y una alineación incorrecta.
En general, si se percibe una sensación de conducción suave, especialmente en curvas pronunciadas, es recomendable considerar una inspección del sistema de suspensión. Ya que, de lo contrario, no se garantiza una conducción segura. También los ruidos de golpeteo durante la conducción son un indicio de un amortiguador defectuoso. Un amortiguador que no funciona correctamente alarga la distancia de frenado y puede provocar la pérdida de control del vehículo.
Ante tales señales, es importante localizar rápidamente un taller y realizar una revisión, ya que la seguridad personal y la de los demás usuarios de la vía siempre es lo más importante.