Síntomas de un amortiguador defectuoso

Los amortiguadores de aire de un vehículo son, al igual que los amortiguadores en vehículos sin suspensión de aire, uno de los componentes más importantes del vehículo, ya que garantizan la seguridad y el confort en la carretera. Sin embargo, si uno de los amortiguadores de aire está dañado, se debe localizar rápidamente un taller para verificar la suspensión.
Pero, ¿cuáles son los síntomas de un amortiguador de aire defectuoso?
Uno de los signos más evidentes y simples de un amortiguador de aire defectuoso es la inclinación del vehículo. Si una esquina se hunde más que la otra en estado estacionado, se siente una conducción inestable o una dirección imprecisa mientras se conduce, es posible que uno de los amortiguadores de aire esté dañado.
Esto puede resultar en un desgaste rápido de los neumáticos, pérdida de control rápida en ciertas situaciones de conducción y/o una distancia de frenado más larga. Otro síntoma sería un "chasquido de metal contra metal" perceptible. Este "chasquido" indica simultáneamente que el amortiguador de aire está perdiendo su suavidad de funcionamiento.
Por último, también pueden surgir fugas de aire en los amortiguadores de aire. Tales fugas de aire ocurren cuando los amortiguadores de aire están desgastados o dañados. Dichos daños, al igual que con los resortes de aire, pueden ser detectados mediante solución de agua jabonosa o aerosol detector de fugas, para localizar y corregir posibles fugas.

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